Resiliencia a la orden del día
Fue un gran acierto que cayera en mis manos el libro “El hombre en busca de sentido” escrito por el psiquiatra austriaco Viktor Emil Frankl. Es duro pero increíblemente formativo en resiliencia.
El autor junto a su mujer y sus padres fueron destinados a distintos campos de concentración y allí fue donde gestó este maravilloso libro en pequeños trozos de papel, que recogía aquí y allá en los que relataba sus experiencias y sentimientos que vivía y sentía en aquel terrible lugar.
Frankl observaba cada día como había compañeros que resistían las más duras condiciones frente a otros que se dejaban morir, literalmente. Al no tener fuerzas interiormente, sus sistemas inmunológicos bajaban y finalmente morían. Se dio cuenta que tanto él como todos aquellos que resistían a esas duras condiciones tanto físicas como psicológicas eran por una razón, habían buscado un sentido a su vida.
Viktor buscó su razón para vivir: sus padres y su mujer, el pensar en ellos le daban fuerza para seguir y pensar que todo ese horror acabaría y podría reunirse de nuevo con ellos le daba una fortaleza mental para seguir luchando, como él decía “quién tiene un por qué para vivir puede resistir cualquier cómo”.
El padre de la resiliencia y de la proactividad.